Lima, 25 de mayo de 2022.- Alrededor de 700 familias migrantes y refugiadas venezolanas están asentadas, actualmente, en el distrito de Lurigancho Chosica, Lima, Perú. La mayor parte se encuentra en la zona de Huachipa, en los sectores de Nievería, Jicamarca, Cajamarquilla y Carapongo. Aquí, las personas migrantes han conseguido, poco a poco, integrarse a la vida local. Sin embargo, al igual que la población peruana, aún ven limitado su acceso a servicios básicos como el agua o el transporte, lo que las coloca en una situación de alta vulnerabilidad.
El fenómeno migratorio en Huachipa (Lurigancho Chosica).
Uno de los primeros impactos del fenómeno migratorio en Huachipa se dio en el ámbito laboral: la búsqueda de oportunidades para acceder al empleo digno ha llevado al desarrollo de capacidades e intercambio de aprendizajes entre la comunidad de acogida y la población migrante, sobre todo joven, para desenvolverse en puestos de trabajo que ofrecen servicio y atención al público. Esto ha ido generando una mejora considerable en la calidad de la atención en diversos negocios del sector.
Jhonny Pacheco, Subgerente de Salud de la Municipalidad Distrital de Lurigancho-Chosica, indica que el gobierno local siempre tuvo una política de inclusión, puesta de manifiesto en las atenciones de primera necesidad que brindan a las familias migrantes y refugiadas en situación de calle, apoyándoles con carpas, utensilios de limpieza y alimentos.
“Venían constantemente entre 50 y 100 personas, familias con niños y niñas, ancianos, de todas las edades. Se les brindaba atención, se les orientaba para que pudieran conseguir trabajo o acceder a procesos de capacitación y emprendimiento. En esto, fue muy importante contar con el apoyo de las ONG”, señala Pacheco quien añade que, aun habiéndose asentado y encontrado empleo, las personas todavía arrastran los efectos de la pandemia, por lo que resulta fundamental continuar brindándoles facilidades para que puedan acceder a los servicios de salud, pero además a la formalización de su situación migratoria en Perú.
En respuesta a las necesidades de la población, se puso en marcha en este sector el Punto de Atención y Orientación a Personas Refugiadas y Migrantes (PAO), en marzo de 2022.
Servicios del PAO central e itinerante.
El PAO es implementado en el marco del Proyecto de Respuesta Humanitaria ante la COVID-19 en Salud, Higiene y Protección para Refugiados y Migrantes en el Perú, ejecutado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la ONG Cesal, gracias al apoyo financiero de la Oficina de Población, Refugiados y Migrantes del Departamento de Estado de los Estados Unidos de América (PRM por sus siglas en inglés).
El PAO ha sido implementado en el marco del Proyecto de Respuesta Humanitaria ante la COVID-19 en Salud, Higiene y Protección para Refugiados y Migrantes en el Perú, ejecutado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la ONG Cesal.
Tiene como finalidad prestar asistencia médica primaria, información y orientación para acceso a la salud, despistaje de anemia, diabetes y colesterol, asesoría legal documentaria, entrega de kits de higiene familiar y femenina, entrega de botiquines, capacitaciones en primeros auxilios y en nutrición, para prevenir la anemia, y distribución de suplementos alimenticios a personas migrantes y refugiadas en situación vulnerable, y también a familias peruanas que conforman las comunidades de acogida.
Katia Ortiz, Coordinadora de Migración de Cesal, indica que la prevención y la detección temprana de condiciones de salud, como diabetes o problemas cardiacos, ayuda a tomar decisiones oportunas, derivar a los pacientes hacia los centros de salud más cercanos y orientarles sobre cómo adquirir el Seguro Integral de Salud.
El PAO central está ubicado en Huachipa, Av. Colectora S/N Nievería, Cesal. Brinda atenciones de lunes a viernes, de 9 de la mañana a 5 de la tarde. Los números para consultas son: 959135317 y 913027635.
En su modalidad itinerante, el equipo profesional del PAO se moviliza hacia diversas zonas de Lurigancho Chosica y también a los distritos de Santa Anita, Ate y San Juan de Lurigancho, participando en campañas y ferias de servicios, de acuerdo con las necesidades existentes en estas áreas, gracias a coordinaciones previas con instituciones públicas del sector salud o del gobierno local, y con otros organismos de respuesta humanitaria y cooperación internacional.
Hasta el momento, se ha conseguido atender de manera integral a 1000 familias y se espera alcanzar la meta de 1500 familias atendidas a finales de junio de 2022.
Junto a OIM, además, se espera poder incluir en los procesos de regularización migratorio a niñas, niños y adolescentes, grupo que no ha venido siendo priorizado en este ámbito.