Este proyecto nace con un propósito claro: sensibilizar y crear conciencia en toda la comunidad educativa —tanto la actual como la futura—, en el sector privado y en todas aquellas personas que juegan un papel importante en la integración de personas extranjeras.
Surge como respuesta a una realidad que cada vez preocupa más: la discriminación, el racismo y las dificultades que muchas personas migrantes siguen encontrando en los ámbitos educativo y laboral.
Por eso, queremos dirigir nuestras acciones a quienes pueden marcar una verdadera diferencia en la defensa de los derechos humanos de las personas inmigrantes: educadores, estudiantes universitarios de áreas sociales (como magisterio o integración), empresas y empleadores, líderes comunitarios y organizaciones sociales.
Nuestro objetivo es sencillo pero esencial: promover una sociedad más justa, respetuosa e inclusiva para todas las personas.