En los primeros paneles se parte de una visión histórica, ubicando la selva amazónica en el contexto del país, con su riqueza natural, paisajística, cultural y lingüística, que atrajeron a los españoles en la colonización. Se centra en la época de las misiones que convivieron durante siglos con los pueblos indígenas y permitieron la continuidad de muchas de las lenguas y tradiciones que aún hoy se mantienen.
Los pueblos indígenas vivieron prácticamente aislados del resto del país hasta el siglo XIX. El comercio del caucho, la explotación de la madera, la extracción del petróleo y más tarde la llegada del grupo subversivo Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru supusieron la desaparición, migración o pérdida de identidad para muchos de los pueblos amazónicos: de esta parte de la historia se hace eco también la exposición.
En medio de esta realidad, y en pleno siglo XX, un sacerdote croata, ahora obispo, Monseñor Gerardo Zerdín, inspirado en las obras franciscanas y de los jesuitas y tras convivir más de 20 años con las comunidades indígenas, ve que la educación es el mejor camino para que los pueblos nativos sigan adelante manteniendo vivas sus lenguas, sus culturas y sus tradiciones ancestrales.
Después de varios años concibiendo el proyecto nace 'Nopoki', la Universidad de los Indígenas en plena selva amazónica de Perú, apoyada por CESAL. El origen de la universidad, el reflejo de la vida cotidiana, así como testimonios de instituciones, profesorado, alumnos y diferentes personas que han podido vivir en primera persona en 'Nopoki', completan la muestra.